miércoles, 30 de enero de 2013

ANTE LOS REYES




ANTE LOS REYES
(Artículo de 1920)




     El otro día la Prensa Asociada nos obsequió con una noticia cablegráfica estupenda. Decía la tal noticia que la Reina, que Su Majestad la Reina de España, con ocasión en que paseaba en automóvil por las calles de Madrid, viendo pasar a un señor sacerdote que iba a pie conduciendo el viático para un obrero que se moría, salió de un salto del lujoso carro, e hizo que el sacerdote ocupase el regio asiento, marchando después a pie hasta la casa del enfermo.
     Leído este cable, he hecho todo lo posible por conmoverme, porque es seguro que la Prensa Asociada lo escribió para eso, para que nos quedáramos atónitos ante el caso como ante un fenómeno nunca visto. Pero por más empeño que he puesto, no he logrado que se me conmueva ni una sola célula del cuerpo; es más, aunque sea con cierta verguenza, confieso que he cometido la irreverencia de reírme. Y puesto ya en el trance de las confesiones, ¿por qué no decirles que todavía me sigo riendo?
     La Reina es mujer, mujer simpática si uno la va a juzgar por los retratos. Y yo ante toda mujer, como no sea un basilisco, me siento fuertemente inclinado a la bondad. Pero ¡por los clavos de Cristo! yo no puedo dar con la manera de tomar en serio, como un gran acontecimiento digno de correr en los signos del cable por todo el mundo, la simpleza de haber realizado la Reina un mero acto de cortesía. Si la cortesía fue para con Dios, representado en el viático, o fue para con el sacerdote, no tengo yo tan mal concepto de la buena crianza de los reyes que me quede estupefacto al verles procediendo con la cortesía o bondad que está al alcance de cualquiera otro simple mortal propietario de un automóvil. Aquí mismo en Panamá ¿cuántos no hacen todos los días con sus automóviles el uso galante para con Dios o cualquier prójimo distinguido que hizo la Reina sin que corra nadie haciendo aspavientos a las oficinas del cable? Si los reyes, que no hacen otra cosa en su vida que dedicarse a actos de ceremonia y relumbrón, no sirvieran ni siquiera para mostrar cortesía en determinados casos, ¿qué habría que pensar de ellos?
     ¡Válgame Dios! ¿Hasta cuándo viviremos tan deslumbrados por el brillo de dublé de las coronas y los ringorrangos oficiales, que cualquier gesto trivial que haga un rey nos parezca un acontecimiento extraordinario? ¿Por cuánto tiempo viviremos todavía tan sometidos al bárbaro fetichismo de los títulos y realezas que haya de salirnos a recordar que un rey o reina es una persona como otra cualquiera, y que, de cada cien reyes que han cruzado por la historia, noventa por lo menos eran unos perfectos mentecatos que valían mucho menos que su cochero?
     ¡Hacer aspavientos y ocupar el cable para comunicarle al mundo que la Reina le cedió su carro al viático! ¿Dónde está la hazaña? ¿Porque se condolió de que el cura iba a pie? Son tantos, tantísimos los que marchan a pie, y a veces cojeando y arrastrándose por la imposibilidad física, que si fuéramos a creer en la tal condolencia, lo que verdaderamente habría que admirar sería el que, en una ciudad como Madrid, donde hay tantos pobres y cojos y ciegos y lisiados de todas clases que rastrean trágicamente sobre el polvo de las calles, la Reina a estas horas no se hubiera resuelto a desprenderse de sus muchos carros para donárselos piadosamente a los más necesitados de entre estos lamentables despojos humanos, que no sólo carecen de todo vehículo sino que ni siquiera disponen de sus propios pies.
     Pero lo grande es que estas cosas haya que apuntarlas todavía en el siglo XX, cuando ya el oficio de rey va haciéndose tan duro, tan precario y hasta tan grotesco en el seno de una humanidad que acaba de tirar por la ventana a tantos zares, káiseres, constantinos y demás ejemplares de una fauna arcaica y casi extinta, que el espectáculo de un rey, más que a infantiles gestos admirativos, debiera movernos a esa mezcla de ironía y de compasión que inspiran los muñecos cuando les vemos ya hechos guiñapos en las manos destructoras de los niños.




VOCABULARIO




  1.Prensa Asociada= Es una agencia de noticias fundada en 1846 con sede en los Estados Unidos.

  2.Viático= Se refiere a una pequeña procesión en que el sacerdote lleva la Sagrada Comunión hasta la residencia misma de un moribundo.

  3.Regio= Real= Perteneciente al rey.

  4.Atónitos= Pasmados o espantados de un suceso raro.

  5.Basilisco= Persona furiosa o dañina.

  6.¡Por los clavos de Cristo!= Expresión coloquial para rogar a alguien encarecidamente.

  7.Relumbrón= Se dice de las cosas que pueden producir gran impresión, pero de escaso valor.

  8.Dublé= Plata dorada. Dícese de lo que tiene apariencia de algo, pero no es.

  9.Ringorrangos= Adornos superfluos y extravagantes.

10.Fetichismo= Idolatría, devoción, veneración excesiva.

11.Mentecatos= Tontos, necios, idiotas.

12.Aspavientos= Demostración excesiva de espanto o admiración.

13.Apuntarlas= Señalarlas, indicarlas, mencionarlas.

14.Precario= Inseguro, inestable, arduo.

15.Grotesco= Ridículo, extravagante, absurdo.

16.Zares, káiseres, constantinos= Transformación en comunes de los nombres propios de los reyes o de sus títulos.

17.Guiñapos= Trapos rotos, jirones de tela.



jueves, 24 de enero de 2013

EL PORVENIR DEL VERSO METRICO




EL PORVENIR DEL VERSO METRICO
(Artículo de 1918) 



      Ahora, en estos días de universal agitación en que tantas cosas se renuevan, no estaría mal que pensásemos y debatiésemos serenamente la interesante cuestión de si debe o no debe seguirse teniendo al verso métrico, a la llamada forma poética, como una seria y refinada modalidad o expresión artística.
     Por lo que a mí toca, declaro que empecé por ser un gran aficionado a ellos --a los versos-- y que más de una vez caí en la tentación de hacerlos; pero cada día me convenzo más de que, hoy por hoy, son un verdadero anacronismo, un mero juguete impropio de la madurez de pensamiento a que hemos llegado.
     Antiguamente, en los tiempos heroicos,  místicos y caballerescos, ciertas emociones, ciertos motivos pasionales y de pensamiento eran cosa tan extraña, tan lejana, tan inaccesible a la ruda sensibilidad y a la tosca imaginación del hombre de entonces, todo exterioridad, que era preciso para comunicarlas, para plasmarlas de modo que no pareciesen ridículas, el hacerlas música, el darles la solemne y enfática resonancia del himno, del poema, de la frase retocada y transfigurada por el metro y por la rima. Todo organismo humano de selección, todo hombre que veía más y sentía mejor que el común de sus semejantes, puesto que no podía hablar, de aquello que veía o que sentía, con sus contemporáneos, porque el nivel cultural de estos era demasiado bajo para que lo comprendiesen, cantaba. Cantaba al principio, en los tiempos del rapsoda, acompañándose materialmente de una lira, laúd, u otro instrumento musical semejante. Y por la música, por el hechizo y solemnidad de la música, alegre o plañidera, era que la tosca red nerviosa del oyente llegaba a vibrar. Después, ya no fue necesario el acompañamiento material de un instrumento, pues a la música de éste sucedió la rima, y poco a poco, a medida que se hacía más amplia la visión del hombre, el verso fue emancipándose más de este elemento de la música y acercándose a la palabra hablada. Hoy, por fin, con Whitman, con Verhaeren, con los versolibristas de ambos continentes, vemos que el verso a alcanzado el límite máximo de la emancipación. Se ha emancipado de toda traba, del metro, de la rima, de la ornamentación retórica y del énfasis, y sólo aspira a una musicalidad interior, que radica más bien en la idea, en el motivo, que en la frase. El verso, pues, se ha espiritualizado, ha dejado de impresionar el oído para ir derecho al alma y sacudirla. Pero al llegar a este grado de elevación, al culminar en esta cima de espiritualización, ¿cómo escapar a la idea de que ésto mismo, que parece libertarle y depurarle de toda broza, lo ha conducido fatalmente a la muerte? Si ya no necesita ni de la ornamentación retórica, ni del énfasis declamatorio, ni de la musicalidad exterior que le suministraban el metro y la rima, si se ha purificado tanto que ya no necesita de ningún artificio para cumplir su objeto, ¿qué diferencia esencial es posible encontrar entre el verso y la prosa? Aunque parecía que la prosa estaba abajo, en la zona de lo concreto y de lo pesado, el caso es que, a medida que hemos ido ascendiendo en la evolución poética, nos hemos ido acercando sin saberlo a la prosa y ya hoy no hay fronteras entre ambas formas de arte y ambas constituyen una sola cosa. ¿Qué son al fin y al cabo todas las bellas artes? Medios de expresión, caminos que escoge el espíritu humano para abrirle paso a su ansia de comunicación, a su fiebre de realización. ¿Y qué matiz del pensamiento y qué temblor del sentimiento no caben hoy dentro de la prosa? ¿Qué de extraño tiene, pues, que el verso se haya hecho prosa, o más bien, que la prosa haya ido extendiendo su zona de influencia hasta abarcar el verso? ¿Qué de extraño tiene que para el hombre de hoy, cerebral, maduro, evolucionado en su sensibilidad y en su pensamiento hasta Ibsen, hasta Anatole France, hasta Shaw, haya perdido el verso su prestigio de antes, quedando poco a poco reducido a la categoría de mero juguete con que todavía se entretienen los que, no teniendo nada grande, ningún mensaje nuevo que decirle a la humanidad, se consagran a la tarea pueril de limar frases y buscar concordancias y armonías de orquestación para seguir cantando cosas viejas y obvias, como la hermosura de los ojos de la amada, o la obscuridad de la noche, o la atracción de los abismos, o la fatalidad de la muerte, o la melancolía de las despedidas, o de la primera cana de los treinta años? ¿Qué espíritu selecto y grande de hoy, sacudido de ansia de expresión, ansia que no pueden sentir sino los que vienen a pelear, a reformar, a quemar con los rayos de una nueva verdad, apela al verso, al renglón corto y a la frase pulida, rítmica y melódica del verso? Nadie, nadie que represente un paso más en la evolución humana, en la escala de valores psicológicos, nadie que sea artista, y artista no es en realidad sino el creador, o sea el explorador, el que excava el misterio, lo ignoto, la noche del enigma universal para extraer algo no conocido o presentido antes que él; nadie que sea verdadero artista hoy le comunica su secreto al verso, que le obliga a vencer mil dificultades de mera técnica, de mero artificio, y que desvía, cuando no debilita, su fuerza de expresión. El verdadero creador tiene impaciencia, furor de comunicación, de irradiación de su verdad. Y lejos de detenerse a componer y retocar y a adornar su instrumento de expresión que es el lenguaje, sólo quiere limpiarle, desnudarle de toda ornamentación, volverle tan sencillo, tan agudo, tan certero como la punta de un puñal.Todo el que tiene algo que decir no se preocupa en escoger ésta o aquella forma de decir, sino que lo que quiere es escoger el camino más recto, el más corto, el más libre de dificultades para llevar su mensaje, y de ahí viene que, no sólo se ha desechado el verso, sino que también la prosa arquitectural de antes se ha aligerado, se ha desceñido sus vestiduras galanas y cada día se hace más sencilla, esto es, más intensa, más rápida y directa la comunicación espiritual entre el creador y el oyente.
     ¿Que hay hombres notables que todavía hablan en verso? Sí; lo mismo que hay todavía, aquí y allá, hombres románticos que se baten a la usanza caballeresca, lo cual no prueba que estemos todavía en la edad caballeresca. Quedan, sí, y quedarán por mucho tiempo hombres que canten sus ideas y emociones, pero es lo cierto que la edad del poeta en verso métrico está pasando ya. La humanidad está vieja, y los versos de antes le van pareciendo cosa de juguete demasiado insípida, demasiado infantil.




VOCABULARIO



  1.Anacronismo= Cosa impropia de las costumbres o ideas de una época. 

  2.Ruda= Tosca, burda, rudimentaria, sin pulimento.
  
 3.Tosca= Inculta, sin pulimento ni enseñanza.
  
 4.De selección= De condiciones superiores.

 5.Rapsoda= Persona que en la Grecia antigua iba de pueblo en pueblo cantando trozos de poesía.

  6.Lira= Instrumento musical antiguo de varias cuerdas.

  7.Laúd= Instrumento músical de cuerdas.

  8.Hechizo= Dícese de lo que cautiva, suspende, embelesa.

  9.Plañidera= Llorosa y lastimera.

10.Broza= Conjunto de cosas inútiles que se dicen de palabra o por escrito.

11.Ornamentación retórica= Uso de lenguaje rebuscado para embellecer la expresión.

12.Pueril= Cosa de niños, trivial, sin importancia.

13.Arquitectural= Muy ostentosa y complicada.

14.Aligerado= Que se ha hecho menos compleja.

15.Desceñido= Que se ha despojado de alguna cosa.

16.Galanas= Bien adornadas.



miércoles, 9 de enero de 2013

REPLICA A UNA CARTA DE A. PEREZ PIERRET



REPLICA A UNA CARTA DE A. PEREZ PIERRET
(Fragmento del artículo de 1917 Réplica a una Carta de A. Pérez Pierret)

                                                                                            
                                                            Noviembre 2 de 1917
                                                            New York                    

"Sr, D. Nemesio R. Canales,
San Juan, P.R.
Mi querido amigo:
     Ya te irás enterando que ví más claro que Guerra lo del desastre en Europa. Detrás de los cañones hay dos civilizaciones que luchan, y es natural que venza la que la necesidad ha hecho más sabia. En la nueva orientación el individualismo desaparece y queda el colectivismo, es decir, el socialismo derivado del imperialismo, después de desaparecer el imperialismo, pero quedando la base de la concentración en la unidad. Es el sistema planetario, en el que desaparecen los universales, y la división del trabajo sustituye a la originalidad."
     "En un principio tendremos el Centro en el Estado, en la Nación, pero más tarde se desintegrará el Todo dentro de la unidad de la civilización y quedará el Centro en el municipio, planetas girando alrededor de un parlamento de la Humanidad, Centro superior del sistema. Los ferrocarriles y los navíos han borrado y borrarán por completo la indumentaria y las costumbres distintas, quedando solamente las pequeñas diferencias de clima y suelo, es decir, han matado el individualismo de la región; los aeroplanos matarán la frontera, es decir, el individualismo de la nación. Todos los hombres pensando lo mismo, todos los hombres vistiendo lo mismo, todos los hombres sintiendo lo mismo, y la poesía a nuestro modo de hombres cerca del mono tendrá que desaparecer y nosotros con ella, porque nuestro sentido estético está fundamentado en la variedad, en la individualidad y el mundo tiende a la unidad, a la colectividad."
     "Tendremos en puerta un mundo negro que no seduce. Sancho ha vencido. Tenemos en puerta la caída de Inglaterra, porque representa la confederación a través de los mares, que es un futuro lejano, y tenemos en puerta la victoria de los Estados Unidos de América y de los Estados Unidos de Europa, porque representa la confederación a través de las fronteras que es el futuro próximo."
     "La libertad individual será restringida bárbaramente para que pueda haber libertad colectiva, y no habrá clases, pero sí escalafones y se pagarán muy caro las monstruosidades, último refugio de la individualidad en decadencia. No tengo que advertirte que la monstruosidad se adquirirá dentro de la división del trabajo, limitándose el plano de acción y de pensamiento hasta tal punto que nadie tendrá la genialidad para la síntesis, perdidos en los detalles del análisis. La síntesis será obra colectiva, de varios. El genio era síntesis de antes, pero en lo futuro no bastará el genio, porque la Humanidad comienza a entrar en la Naturaleza y muy adentro."
     "Te voy a poner un ejemplo. Yo estoy enfermo y voy a ver a los hermanos Mayo. Estos doctores que vislumbran a fuerza de especialismo la civilización del futuro están rodeados de químicos, de patólogos, de bacteriólogos, de electricistas, de manipuladores, de expertos en rayos X. Estos doctores son la oficina central de complicados análisis hechos en una casi perfecta división de trabajo y llegan a la síntesis en virtud del trabajo colectivo anterior que no serían capaces de verificar. El diagnóstico es individual, es desde la cumbre, pero la cumbre ha sido formada previamente. Estos señores doctores por lo tanto no necesitan tener genialidad, lo que necesitan tener es método, pero el resultado es superior a la del médico genio."
     "En lo futuro el trabajo será siempre así. Es el futuro de los hombres de método, es el futuro de los sajones, de los pueblos fríos del norte."
     "Del imperialismo que inventó la aristocracia pasaremos al socialismo que copió la democracia, del trust que inventó el egoismo pasaremos al control de las riquezas por el Estado, que copió la justicia, que es cosa de un instante de vida, y que está sometida, a la supervivencia del más apto, que no es tampoco el mejor, sino el que mejor se acomoda al ambiente de un instante de vida."
                                                            
                                                            Antonio Pérez Pierret                        

                                                                                                                                                           


     Hago traición a mi querido amigo trayendo aquí los párrafos de la carta que preceden, porque, en mi afán de acumular cosas interesantes en mi periódico, no he podido sustraerme a la tentación de ofrecer a los lectores inteligentes el copioso raudal de ideas que, burla burlando, en carta escrita al correr de la maquinilla, fluye del cerebro agilísimo de Antonio Pérez Pierret. Y además... he querido valerme de la ocasión para propinar impunemente al fraternal compañero ausente unos cuantos garrotazos que merece por las brillantes, por las geniales barbaridades que se complace en endilgarme.
     ¿Quién le ha dicho a usted... quién te ha dicho a tí, mi insensato amigo, que el mundo camina a la ruina de las fuertes individualidades y al apagamiento definitivo del misterioso foco mental sintético del genio? Si es al revés, si es todo lo contrario, si es a través de la multiplicación de las especialidades --unos hombres haciendo ésto, otros aquello, y otros lo de más allá-- es como más facilidades tendrá el instinto creador del genio para abarcar el conjunto, la colección completa de los detalles, de las especificaciones múltiples hechas por el enjambre humano, y remontarse desde ellas a las grandes, luminosas y fecundas concepciones. Antes, cuando la división del trabajo estaba todavía en ciernes, los genios, los videntes, tenían doble labor; la labor paciente, impropia de ellos, de irse enterando, de pasar primero por sobre un maremagnun de pesados materiales de pura información, para luego atreverse a generalizar, a echar la red en el mar de lo ignoto y robarle al misterio una realidad más. Mientras que hoy la multiplicidad y diversidad crecientes de los que exploran lo obvio, lo sujeto a comprobación inmediata, releva al genio de la cachazuda búsqueda y de la asimilación enfadosa de este amontonamiento de cosas menudas de segunda mano, pues le suministra hecho el estudio o averiguación que antes tenía que hacer él mismo, y le deja las alas completamente sueltas para volar.
     Y no es que yo niegue, mi queridísimo pero maromerísimo amigo, no es que yo niegue que vamos marchando, más a prisa de lo que les parece a muchos, a ese colectivismo social y total, y fatal, de que hablas. Al contrario, yo espero, y creo, que cada cañonazo que se dispara en Europa es un salto hacia ese nuevo tipo de mecanismo social. Pero en ese colectivismo no veo el triunfo de la mediocridad, y la horrenda nivelación y uniformidad de valores que nos pinta mi amigo, sino, muy al contrario, de ese colectivismo, de orden político y económico, pienso que ha de salir la libertad que no tenemos hoy, y donde quiera que hay libertad hay individualidad. Lo que se nos va a nivelar es el estómago, para que no estén unos pocos ahítos --como tú-- mientras otros, por carecer de todo --como yo-- acaban por no soñar en otra cosa que en el hallazgo de un hueso que roer.
     Eso es lo que sucederá: todos tendremos igualdad de medios de allegar comida; todos tendremos igualdad de medios de expresión política--y gracias a este acuartelamiento general de estómagos y de votos, dejaremos de ser las sabandijas esclavas y hambrientas de hoy, para ser hombres de veras y diversificarnos e individualizarnos hasta más no poder. Colectivismo, para trabajar, para repartirnos por iguales partes las faenas conducentes al aseguramiento de una producción constante y copiosa que llegue a todas partes, de igual manera que hoy nos repartimos los dolores y peligros de la guerra. Pero ¿hemos de ser mañana, por el trabajo de todos a beneficio de todos, menos libres que hoy, en que la tarea está tan torpemente y tan horrendamente repartida que a un lado está el ejército inmenso de los que trabajan sin descanso y al otro lado el grupo, la docena de parásitos privilegiados a cuyas manos va a parar todo el beneficio de la labor acumulada del inmenso ejército de parias?
     "Todos los hombres pensando lo mismo, todos los hombres vistiendo lo mismo, todos los hombres hablando lo mismo, todos los hombres sintiendo lo mismo, y la poesía a nuestro modo de hombres cerca del mono tendrá que desaparecer y nosotros con ella, porque nuestro sentido estético está fundamentado en la variedad, en la individualidad, y el mundo tiende a la unidad, a la colectividad." Eso dices, bárbaro, como quien no dice nada, y a mi me falta tiempo para salirte al camino a gritarte que mientes; MIENTES, sí, mi fraternal amigo, como un vil villano que hay siempre dentro de todo mecanismo humano, por selecto y complicado que sea, que se abandona al moho de la inacción. No haces nada, no te inquietas por nada; estás rico, estás gordo, y entretienes los tedios de tu saciedad, de tu esterilidad, fabricando esos absurdos monstruos de la imaginación, de una potente imaginación sacada de quicio por una superalimentación.
     Mientes, sí; ¿qué mayor concentración de fuerzas y especialización de funciones que las que vemos perennemente en la naturaleza? Y, sin embargo, ¿dónde encontrar, cómo concebir una más maravillosa diversidad y deferenciación de tipos, dentro de cada género, de cada especie y de cada familia, que en la misma naturaleza, en el seno de la cual no encontraremos nunca dos rostros humanos iguales y donde hasta las manos tienen una fisonomía especial y distinta, no ya de especie a especie, sino de individuo a individuo? ¡Qué disparate! Si es ahora, ahora que tan cerca estamos del colectivismo ese con que sueñas, que más relucen y deslumbran y se imponen las fuertes unidades, los tipos selectos para la acción o para el pensamiento.
     "Tenemos en puerta", dices, "un mundo negro que no me seduce. Sancho ha vencido." Mentira. Ni tenemos en puerta un mundo más negro, sino más claro, muchísimo más claro que el anterior, ni Sancho ha vencido, sino que está siendo acorralado diariamente. ¡Qué va, hombre de Dios, qué va a vencer Sancho, si Sancho es el hidrópico y elefántico vientre del señor feudal de hoy, y este señor está expirando!
     "La libertad individual será restringida bárbaramente para que pueda haber libertad colectiva..." Mentira otra vez. No tiene que restringirse nada para buscar libertad colectiva, por la sencilla razón de que la libertad colectiva ya la hay. Las naciones, salvo aquellas pequeñas que están intervenidas, son hoy independientes, soberanas, completamente libres. ¿A qué, pues, salir a buscar lo que ya se tiene? Lo otro, lo de la libertad individual es lo que falta hoy, a causa de la esclavitud proletaria del mayor número, y eso es lo que se buscará, y eso es lo que vendrá por mediación del socialismo. ¿Tu no eres socialista, amigo mío?  ¿No crees, no admites en tu carta, al referirte al socialismo, que le ves venir? Pues precisamente viene a socializar la riqueza o sea, a librarnos a todos, a los ricos y a los pobres, de la bárbara presión de la riqueza, y una vez emancipados de esa opresión, ya no habrá trabas para el desenvolvimiento de la personalidad de cada cual..
     Y termino. Ya ésto va largo. Ya ves como he convertido tu carta en materia periodística. De tu carne adiposa y estéril de desocupado y de saciado, he cortado una rebanada y me la he comido. Sé que eres comprensivo y que te alegrarás de la paliza de realista que le he dado a tu fofo pesimismo de parásito. De parásito consciente que le busca disculpas a su fuga de toda aviación en zonas superiores, para fingirse cómodo y a gusto en la modorra ahita, plebeya y resoplante, de un vulgar Falstaff.




VOCABULARIO




  1.A. Pérez Pierret= Antonio Pérez Pierret (1885-1937)= Abogado y literato puertorriqueño; una de las figuras de más alto relieve artístico del movimiento modernista hispanoamericano. Fue uno de los amigos íntimos de Nemesio R. Canales.

  2.Guerra= Miguel Guerra Mondragón (1880-1947)= Abogado, político y literato. Fue, junto a Nemesio R. Canales, miembro de la Cámara de Delegados. Junto a Nemesio y Luis Lloréns Torres funda la Revista de las Antillas, baluarte del movimiento modernista en la isla.

  3.En puerta= En puertas= A punto de ocurrir.

  4.Burla burlando= Disimuladamente o como quien no quiere la cosa.

  5.En ciernes= Estar en sus principios.

  6.Ignoto= No conocido ni descubierto.

  7.Cachazuda= Se dice de las cosas muy lentas.

  8.Fatal= Inevitable.

  9.Ahítos= Saciados, hartos.

10.Parias= Personas excluidas de las ventajas de que gozan las demás por ser consideradas inferiores.

11.Moho= Hallarse ocioso o parado.

12.Adiposa= Llena de grasa o gordura.

13.Fofo= Insustancial, fútil, vacuo.

14.Modorra= Aturdimiento, adormecimiento, insensibilidad.

15.Falstaff= John Falstaff= Personaje de ficción creado por William Shakespeare mezcla de cómico y bribón.
     



sábado, 5 de enero de 2013

NI IDEALISTA NI POSITIVISTA




NI IDEALISTA NI POSITIVISTA
 (Artículo de 1917)




     No soy idealista ni positivista. No soy idealista, porque no gusto de idealizar las cosas de manera que parezcan lo que no son. Y no soy positivista, porque he visto hace tiempo que los llamados positivistas, a fuerza de desdeñar las musarañas de los idealistas, se pegan tanto de las cosas, de las cosas mirables, tocables y comibles, que acaban por no ver sino aquella parte más superficial, más ramplona, más tosca, transitoria y engañosa de la vida.
     Para los idealistas, el mundo es sólo un pretexto para que se manifieste en todo su esplendor la virtualidad de tal o cual principio, de tal o cual idea.
     Para los positivistas, todo lo que no sea medible o pesable, todo lo que no huela a ciencia, esto es, a anotación y comprobación machacona, enfadosa, pedantesca, limitada y pueril del mero hecho, o sea, del mero fenómeno u orden de fenómenos, es música celestial y sólo merece el desdén más olímpico.
     De modo, que, en mi sentir, unos y otros se equivocan de medio en medio. Iba a decir que los unos por carta de más y los otros por carta de menos, pero, pensándolo mejor, digo que ambos por carta de menos.
     De menos, sí; porque unos y otros achican, empequeñecen el misterio inmenso de la vida y tratan la compleja maraña de lo existente como si de ella se pudiera hacer una bolita y metérsela en el bolsillo. De cartón pintado la bolita de los idealistas, de carne o de piedra la bolita de los positivistas. Para los primeros la bolita es la idea, lo que ellos llaman campanudamente un ideal, un principio, una norma preestablecida de acción. En cambio para los positivistas, la bolita es lo concreto, lo sujeto inmediatamente a experimentación... y a masticación.
     Y lo cierto es que basta un poco de visión serena de las cosas para descubrir que tan disparatada es la idealización sistemática, que saca puerilmente de quicio las cosas y nos las presenta como debieran ser y no como efectivamente son, como la estulta manía positivista de no querer ver más que lo que está a dos dedos del observador. Tan ciego y tan tonto es el que por querer mirar demasiado alto no se da cuenta de lo que tiene a su lado, como el que por no querer mirar más allá de sus propias narices acaba por no ver.
     Soy, pues, realista, esto es, hombre que acepta la vida tal como es, sin adulterarla, sin mixtificarla, sin querer volverla una novela cursi como lo hacen los románticos, ni tampoco un jamón o una máquina como pretenden los positivistas.
     La vida unas veces me araña y me hiere, y otras veces, muy pocas, me arrulla y acaricia, pero siempre es la Vida, esto es, la marejada inmensa, encrespada, convulsa, rugiente y enigmática de la cual soy yo a manera de simple burbuja tornátil, sujeta al ilusorio vaivén del sufrir y el gozar, del vivir y el morir.
     ¿Quién soy yo, mísera burbujita, para hacerle ascos a la marejada de que soy parte y pretender que se vuelva merengue para adaptarla a mi gusto, a mi gusto personal, limitado y mezquino?
     En la marejada estoy, con ella voy fundido en calidad de gota, y aquí hoy y allá mañana, comprendo que mi sino es mirar, y observar, dar mi nota, mi temblor, mi fulgor, en el concierto de la vibración universal. Y tanto cuando el choque con los hombres y las cosas me de la sensación de caricia, como cuando me da la sensación de zarpazo, me repliego y me hundo dentro de mí mismo, y allá dentro, como dentro de un templo, la emoción religiosa del enigma de lo eterno me visita, y con sólo vivir, y con sólo sentirme minúscula parte de un todo infinito, la carga de mi propia existencia se aligera... y en el latido de mi sangre acabo por sorprender y por gozar el eco alucinante del jadeo colosal de lo inconsciente en su pugna incesante por hacerse consciente.
     Y vale más, vale mucho más la impresión fugitiva de este inmenso eco, que el merengue empalagoso de los idealistas o el jamón feo y pesado de los positivistas...
    



VOCABULARIO




1.Idealista=Partidario del sistema filosófico que propone la idea como principio del ser y del conocer, por encima de cualquier consideración práctica.

 2.Positivista= Partidario del sistema filosófico que considera que el conocimiento humano sólo puede basarse en los sentidos.

 3.Ramplona= Vulgar, ordinaria, corriente.

 4.Virtualidad= Posibilidad, probabilidad.

 5.Machacona= Reiterativa, insistente, redundante.

 6.Enfadosa= Fastidiosa, molestosa, engorrosa .

 7.Pedantesca= Jactanciosa, presunciosa, petulante.

 8.Pueril= Trivial, fútil, vana, sin importancia.

 9.Carta de más= Se usa para denotar el exceso en lo que se hace o se dice.

10.Carta de menos= Se usa para denotar el defecto en lo que se hace o se dice.

11.Maraña= Enredo, confusión, embrollo.

12.Campanudamente= Pedantescamente, ostentosamente, jactanciosamente.

13.Estulta= Necia, tonta, idiota.

14.Realista= Partidario de la doctrina filosófica según la cual la realidad existe tal como es aparte e independientemente de la conciencia.

15.Adulterarla= Falsificarla, falsearla, tergiversarla.

16.Mixtificarla= Adulterarla, desvirtuarla, deformarla.

17.Novela cursi= Se dice de las obras cuando en vano pretenden mostrar refinamiento o sentimientos elevados.

18.Románticos= Idealistas.




miércoles, 2 de enero de 2013

REMINISCENCIAS DOLOROSAS



REMINISCENCIAS DOLOROSAS
(Fragmento del artículo de 1917 En Jayuya

     

     Dos días en Jayuya. Me envuelve y me acaricia todavía la onda del aire fresco de mis montes y el mugido tan manso y tan profundo de mi río. Dos días de paz y de melancolía en que pude aliviar mi gran fatiga de luchador por fuerza, bañándome de olvido y de inocencia en el recuerdo de niñez que fluye para mí de cada casa, de cada fuga de vereda, de cada recoveco de los bosques, de cada línea y cada ensoñadora bruma del paisaje.
     ¿Por qué no permitió mi funesto destino que me quedase allí, sin haber salido jamás a esta estéril faena de hormiga extraviada, o rata perseguida, que me ha torturado en las calles de Ponce y de San Juan? Yo hubiera sido allí un manso mayordomo de finca de café, o un buen ventorrillero, o simplemente un cuidador de vacas y gallinas. Hubiera sido eso o cualquiera otra cosa, pero hubiera vivido en paz conmigo mismo y nadie me hubiera robado mi tiempo, mis horas, mis mañanas, mis tardes y mis noches, mis impresiones vírgenes y libres de este enigma alucinante de las cosas. ¿Quién hubiera osado allí obstruir mi mente y prostituir mi conciencia con las mil zarandajas fósiles y fofas de los libros horrendos, chorreantes de venerable idiotez, en que la audacia de las alas locas de mi hambre de verdad y de sol y de rayo de luna zozobró para siempre a cambio del vil pan de cada día?
     ¡Oh esta feria cochina de aldea en que ramplonamente y mercenariamente me he ido envejeciendo! Vengo con rabia, con ganas de morder y de patear a alguien, cuando me acuerdo de mi selva, de mi río y de mis montes, y me encuentro ya casi en camino de ser respetable, y pienso con angustia en el alegre y sano, madrugador y humano, pensativo y artista campesino libre que yo hubiera sido de ventorrillero o cuidador de vacas o músico de cuatro en la noble rusticidad jayuyana. Yo hubiera sido siempre, mañana, tarde y noche, YO, gran señor de mí mismo, principio y fin de un gusanito humano repleto de animalidad y de divinidad. ¡Cuántas horas de tarde y de noche, saturadas del cósmico enigma, torpemente perdidas en el lóbrego antro de una profesión! ¡Cuánto ensueño fecundo, cuánto hervor de misterio recóndito y celeste en el río, en la vereda, en la loma, en el risco, en el ave, en la copla, en la yerba, en la vaca, en el perro, en la fabla sencilla del jíbaro, y en el latir profundo y perenne del Todo en la Nada del llano y del monte, del hombre y del insecto!
     


           

VOCABULARIO


  

  1.Jayuya= Pequeño pueblo, cuna de Nemesio R. Canales, situado en la Cordillera Central de Puerto Rico en los 18°13′00″N 66°34′00″O.
  
  2.Mugido= Voz de algunos animales. Dicho del viento o del agua: producir ciertos sonidos.

  3.Manso= Apacible, suave, sosegado.

  4.Por fuerza= Contra la propia voluntad.

  5.Fuga= Visión instantánea y fugaz.

 6.Funesto= Aciago; que origina pesares. Triste y desgraciado.

 7.Mayordomo= Criado principal encargado del gobierno económico de una casa o hacienda.
  
 8.Ventorrillero= Dueño o encargado de un ventorrillo (pequeño establecimiento comercial generalmente en las afueras de una población).

  9.Vírgenes= Puras, primeras, inmaculadas.

10.Zarandajas= Cosas menudas, sin valor, o de poca importancia.

11.Fósiles= Viejas y anticuadas (que no están ya en uso).

12.Fofas= Dícese de las cosas vanas o triviales.

13.Chorreantes= Que tienen abundante salida de cosas iguales y de poca importancia.

14.Zozobró= Que estuvo en gran riesgo y muy cerca de no lograr alguna cosa.

15.Vil= Bajo, indigno, despreciable.

16.Feria= Lugar donde se vende muy barato por necesidad urgente de dinero.

17.Cochina= Grosera, chabacana, vulgar.

17.De aldea= De lugar inculto, ordinario.

18.Ramplonamente= De modo vulgar, chabacano.

19.Mercenariamente= Trabajando exclusivamente por dinero.

20.Cuatro= Instrumento por excelencia de la música campesina puertorriqueña de diez cuerdas metálicas y algo más pequeño que la guitarra.

21.Lóbrego= Sórdido, mísero, desgraciado.

22.Antro= Refugio, escondrijo, guarida.

23.Fecundo= Provechoso, fructuoso, productivo.

24.Hervor= Ardor, entusiasmo, inquietud.

25.Fabla= Fábula= Relatos ficticios frecuentemente usados por los campesinos puertorriqueños con intenciones didácticas.